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Mostrando entradas de 2013

Descanso de blog.

No es una despedida, porque no lo es, quiero seguir con mi blog, pero la verdad es que desde que he vuelto al trabajo no tengo tiempo material para seguir con todo, no me da la vida para más y no quiero agobiarme pensando que también tengo esto abandonado. Así que aunque tengo miles de cosas que contar, la experiencia de compaginar trabajo con la crianza de mis hijos, la sorpresa de mi marido por el cumpleaños de mi hijo y por el mío, el final de la tercera temporada de Juego de Tronos, mi nostalgia al cumplirse un año de la muerte de mi padre, y tantas cosas más, debo darme un descanso del blog. Cuando vea que pueda o que necesito volver lo haré, éste es un hobbie más, uno de mis favoritos, pero ahora lo primordial es cumplir mis responsabilidades y para hacerlo debo aparcar un poco este espacio. Gracias por seguirme, por leerme, por veniros por aquí aunque yo no me dejé caer ya mucho por estos lares. Un abrazo fuerte a todos, y quien ya sabe puede seguir mis andanzas por facebook o p

La baja laboral española, el peor enemigo de la LM.

Con mi mayor me incorporé al trabajo cuando él tenía 6 meses y no me fue complicado lo de la LM exclusiva que promueve y aconseja la OMS hasta esa edad. Ahora con mi segundo hijo que me ha tocado volver a las 16 semanas justas a mi puesto de trabajo ya me veo que lo de la LM exclusiva se complicará. Y os prometo que no me rendiré pero ya empiezo a tener mis primeros handicaps. Mientras estoy en la oficina, cuatro horas de momento, mi peque se queda al cargo de su abuela, y yo le he dejado un congelador repleto de botecitos de leche mía congelada de retén. A parte cada mañana la menda se muñe para que mi retoño tome su leche lo más fresca posible. Cada día mi bebé en esas horas en las que estoy fuera de casa suele consumir un bote congelado más el fresco que dejo. Y aún así mi suegra dice que va justa la cosa. Yo le digo que coja otro bote más del congelador y que por la tarde me aplicaré para hacer acopio de más reservas. Pero ella no se queda convencida. O no quiere quedarse convenci

La reentré por la puerta grandeé.

La tonta de mí pensaba que al pringar toda la baja maternal la recompensa la tendría al volver a la oficina. Claro total no había desconectado nada, de hecho había resulto muchos temas via teletrabajo, tanto pringue debía valer para algo. Sería un leve impass, un juego de niños. Así que el viernes llegué relajada a mis aposentos laborales, como si el lugar al que me dirigiera fuera un spa o similar, al tiempo que me daba de bruces con la cruda realidad. Y fueron varios los indicadores, pero ennumeraré sólo tres: 1- una mesa colgadísima de carpetas y papeles 2- un jefe que me invitó a una reunión nada más llegar 3- unas compañeras que me miraban con cara condescendiente como pensando la vas a flipar colega. Y así fue el viernes flipé un poco, ayer un poquito más y hoy me he agobiado directamente. La verdad es que en la fauna de la oficina hay que andarse con pies de plomo y hoy ha sido el día en el que he caído directamente en la cuenta de que no voy a tener el regreso fácil. Si a

El gatito invisible.

La culpa es mía. Totalmente. Que jugué con fuego una vez y me estoy quemando viva. A los tiernos dos años y medio mi retoño abandono el chupete previa maquinación "maquiavélica" mía. Una noche un misterioso gatito se llevó su chupete y nunca jamás se supo de él. No fue muy traumático, ya lo conté aquí . Pero a partir de ahí y a modo de venganza se me acabó la tregua que la siesta del peque me proporcionaba porque ya no volvió a echar siestas nunca "mais". Este fue motivo suficiente para jurar y perjurar que si volvía a parir otra vez mi nuevo retoño no dejaría de llevar chupete hasta que se fuera de botellón porque aquí la menda no se lo quitaría ni con aceite hirviendo. Pero la historia del gatito no acabó aquí. La verdad es que desde hace mucho tiempo cada vez que mi adorado tesoro comete una tropelía con nocturnidad/diurnidad y alevosía la culpa se la echa al gatito misterioso y se queda tan pancho. La última, esta semana, el urinario del baño pequeño apareci

La mujer impasible.

En el colegio de mi mayor, en concreto en su clase, la mayoría son hijos únicos, es curioso, son de la quinta del 2008, la del inicio de la crisis, y muchas madres, sobre todo desde que me vieron el bombo del segundo embarazo, me han espetado que ahora no es momento. Y lo sentencian firmes y yo callo y otorgo porque no voy a iniciar allí un debate de calado intelectual sobre la conveniencia de tener uno, dos, tres o quince hijos ahora o en otro momento cuando yo he tenido mil dudas siempre y además no tengo porque dar lecciones a nadie, ni alimentar bocas ajenas. Así que permanezco impasible. Ayer al final fuimos a la comunión de la ahijada de mi socio en Barcelona, Murphy se debió liar en otra cosa este fin de semana y nos dejó tranquilos. El evento era en un colegio religioso muy pijo del Opus Dei para más señas en una buena zona de la capital catalana y los monovolumenes familiares cargados con mínimo tres hijos iban y venían con una frecuencia estrepitosa. No sé qué habrían pensad

Hacer planes con niños, o lo que es lo mismo, misión imposible.

En la reunión del cole su profe lo dijo, el nene nunca se pone enfermo, tiene las mejores estadísticas en eso de su clase, en eso y en altura, porque también es el pino de su clase. Y yo orgullosa, no orgullosísima de tener un machote sanote en casa, para que os voy a engañar. Pero claro si hay que ponerse malo uno se pone cuando la familia tiene planes.  Un año hace que sabemos que el 5 de mayo de este 2013 íbamos de comunión, y no una cualquiera, la ahijada de mi socio es la comulgante, no podíamos fallar al evento, claro, bueno no podíamos pero puede que fallemos porque claro el sanote machote de mi hijo ha decidido coger la varicela justo esta semana, pobrete no es que lo haya hecho aposta pero siendo que la varicela rondaba desde hace casi un mes por su colegio también ha sido mala pata que haya ido a topar a nuestra puerta justo ahora. Y aunque la ha pillado muy leve, con poca erupción y nada de fiebre, dado que esta vacunado, ésta ha venido acompañada de un simpático resfriado

Las historias de amor que sí me gustan.

Ayer por la tarde de nuevo volvieron a hablar por enésima vez del pesado de Grey, si xddd ya no sé cuantas veces me han recomendado leer esa trilogía, y cuando les digo que he intentado leer el primer libro y que no logré leer ni la mitad, me dicen que hay que seguir que seguro que me engancha que es una historia de amor y sexo increíble y que es imposible que no me guste. Al principio trataba de defender el por qué no me gustó pero ahora ya paso y simplemente respondo que no me van las historias románticas. Pero en realidad y revisando algunas de las lecturas que más me han impactado a lo largo de la vida me doy cuenta de que no es así, porque entre mis libros de cabecera he de reconocer que hay grandes historias de amor: Cumbres borrascosas, Carta de una desconocida, El amor en los tiempos del cólera, Orgullo y Prejuicio, Grandes Esperanzas, Ana Karenina, por ejemplo. Sí ya sé que son grandes historias de amor clásicas, que nada tienen que ver con la trilogía de Grey, pero creo que p

En la clase de mi mayor.

El miércoles post Sant Jordi fui por la tarde a leer un cuento a los niños de la clase de mi hijo y la verdad es que me encantó la experiencia. El año pasado me lo propusieron pero con los horarios del trabajo era imposible. Este curso como aún ando de baja maternal, poco me queda ya, snif, no he podido resistirme a participar en esta actividad que se desarrolla todos los años durante la semana de Sant Jordi y que consiste precisamente en eso, en que padres y madres vayan a la clase a contar un cuento a sus pequeños y sus compañeros de clase. Por supuesto mi hijo eligió la historia y no fue otra que su favorita, la leyenda de Sant Jordi . Desde la guardería está emocionado con la historia del caballero que salva a la princesa de las fauces del dragón, siempre ha querido ser Sant Jordi y de hecho juega a ello muchas veces. Así que ese cuento les leí  con mucha emoción y fue una gozada porque el interés que ponen a estas edades con las historias es fabuloso, realmente les introduces con

Este año me pido....

Ayer fue uno de los días más bonitos del año, Sant Jordi, aquí en Cataluña, San Jorge en mi tierra Aragón, donde además es festivo. Pero Aru estaba pachucha con gastroenteritis y sin ganas de nada. Así que por la tarde hice un pequeño esfuerzo para quedarme en el cuenta cuentos del cole de mi hijo y poco más. No salí como cada año a dar una vuelta y comprarme algún librito como manda la tradición. Eso sí la rosa no me faltó, mi socio me la trajo a mediodía cargadita de amor. Claro que sí. De todos modos como no me compré ningún libro ayer y como además se acerca el día de la madre, este año ya me he elegido yo el regalo que quiero para ese día. Y no es otro que la novedad editorial del año que ninguna madre que se precie debería dejar de tener en su biblioteca: Una Mama en Alemania . Sigo desde hace mucho tiempo el blog fantástico de su autora y estoy como loca por leerlo. Vosotros no? Animaos que os echareis unas risas!

La Merkel de mi casa.

De acuerdo que hace un par de días se publicó que el Excel que sustentaba las teoría de austeridad que Merkel y sus secuaces aplicaban en Europa tenía algún fallo y que puede que sus recortes a lo bestia no funcionen, vamos que no hace falta ser un experto en Excel para darse cuenta de que tanto recorte nos hunde aún más, y tampoco hace falta ser Einstein para saber que estas hojas de cálculo las carga el diablo y suelen tener más fallos que una escopeta de feria, pero con todo hoy lo que os quiero contar en un problema que tengo conmigo misma y que es de difícil solución. Os confieso que soy la Merkel de mi casa. La austeridad la llevo en mis venas, y me viene de herencia, nieta de un tacaño de órdago, hija de otra tacaña de renombre, Aru no podía ser de otra manera, más prieta que el pantalón de un chulo discotequero de los 70. Y me casé con otro tacaño pero el pobre a mi lado parece lo más díscolo que hay en la faz de la tierra, angelico. Porque lo mío es de traca. Ya en la época

Tres meses con mi bombón.

Tres meses ya han pasado desde que nació mi bombón, mi hijo pequeño, mi bebé, mi alegría y mi todo. Adoro a mis dos hijos por igual y estoy disfrutando a tope de esta segunda maternidad, saboreando cada momento con la magia que tener a un recién nacido en casa regala. Olerle, besarle, abrazarle, dormir a su lado, escuchar esa respiración pausada, darle pecho, cobijarle, verle sonreír, es indescriptible lo que estoy viviendo, me da pena que el tiempo pase tan deprisa, de verdad. Y observar a mi hijo mayor, junto al bebé, tan cariñoso, tan emocionado por tener un hermanito, es tan bonito, que me caen las lágrimas de pura emoción. Han habido momentos muy duros, sobre todo éste . Pero la verdad es que los momentos de felicidad absoluta han sido los que han ganado en esta partida y sólo puedo decir lo encantada que estoy siendo madre de dos. Junto a mi marido, al que conocí un 9 de abril de hace 19 años, madre mía como pasa la vida, estamos creando una familia maravillosa, y me siento tan

Zombieland.

He repetido por activa y por pasiva que a mí la falta de sueño me mata, me deja ko, me cambia el humor y me convierte en una Mrs. Hyde muy pero que muy chunga. El colecho y la lactancia materna son dos grandes aliados para mí en esta segunda maternidad para dormir bien. De momento el protocolo es acostar al peque en su minicuna cuando se queda frito después de nuestra cena, o mientras miramos la tele. Cuando se despierta, dependiendo de la hora en la que se haya dormido (por ejemplo si se duerme a las 8 se despierta sobre las 3, claro, pero si se duerme a las 12, hasta las 7 de la mañana no suele despertarse), lo paso a mi cama, le doy pecho en la posición tumbada de lado y a seguir roncando. Ya le dejó allí el resto de la noche y duerme como un bendito. Su padre descansa y su madre también. Su hermano mayor ya ni te cuento, que duerme feliz en su cuarto, exigiéndonos que le cerremos la puerta por si acaso se despierta el peque y le molesta para dormir, alucina!!! Más adelante tengo

Actitudes que no comparto: el cachete a tiempo.

La semana pasada fui testigo de dos momentos difíciles de presenciar como madre que soy. Uno de ellos a la salida del colegio, una compañera de mi hijo se escapó de la mano de su padre que estaba hablando con otra persona dentro del recinto para saludar a mi hijo y un par de amiguitos más que estaban con él. El padre enfurecido salió y la agarró de la mano con una fuerza inusitada y ante nuestros ojos estupefactos le dio un sonoro azote. Un par de madres que andaban a mi lado y yo nos quedamos perplejas ante semejante escena. Mi hijo también se quedó alucinado dado que él no está acostumbrado a este tipo de actitudes violentas. Al cabo de unos días, el domingo, estábamos con un grupo de amigos de picnic en el campo. Después de comer una parte del grupo se fue de excursión a un río cercano, yo me quedé con mi bebé en el sitio donde habíamos comido, pero mi marido y mi hijo mayor se fueron de paseo con ese grupo. A la vuelta mi hijo estaba un poco serio y le pregunté qué había pasado y

Aficionándome a la reposteria.

Inicialmente la culpa es de mi hermana, porque ella se puso hace un tiempo a hacer cosas ricas, y yo estaba allí voluntaria a primera fila para probarlas, me picó la curiosidad y luego la quise copiar, que conste que ella es mejor, más habilidosa y le sale cada delicatessen que te echa para atrás. Además poco a poco se va comprando más "cacharrillos" de cocina adecuados, ha hecho algún curso, se empapa del tema en internet, y claro se va perfeccionando un montón. Yo estoy a varios años luz de ella pero poco a poco disfruto más de esto de hacer dulces y tartas. En mi caso siempre se me dio mejor la cocina de primeros y segundos, más que la de postres y dulces, por eso este descubrimiento tardío mío resulta todo un reto interesante para mí. Ahora en mi casa ya nunca falta, ni harina, ni azúcar glas, ni huevos, ni mantequilla, para hacer cualquier bizcocho en el momento en que me da por ahí. A mi nueva afición tengo también otros culpables a quienes imputar. Mi hijo mayor que s

Mi último gran error, teletrabajo en la baja maternal.

En mi trabajo y concretamente en mi departamento ha habido en los últimos dos años cuatro embarazos, el último el mío. Con la crisis y los recortes, que os voy a contar, se decidió no sustituir esas bajas maternales y siempre nos hemos ido apañando entre el resto para sacar adelante el trabajo de la que no estaba. La baja anterior a la mía fue de una mama primeriza muy responsable en su trabajo, dicho sea de paso, que se ofreció voluntaria a teletrabajar desde casa para que no nos colapsáramos tanto las que nos quedábamos en la oficina y al gerente de la empresa le encantó la idea. Ella estaba de baja pero se apuntaba las horas que hacía en casa y luego esas horas se las descontaría a la vuelta al tajo. Cuando me quedé embarazada y al cabo de tres casi cuatro meses lo conté en la empresa mi jefe no tardó ni cinco minutos en proponerme que hiciera lo mismo que mi predecesora en estado. Y yo la verdad es que inconsciente, le dije que sí. Con el paso de los meses seguí manteniéndome en

La guinda del pastel de la tercera temporada de The Walking Dead.

No he leído mucho por ahí sobre la finale de esta semana de The Walking Dead para no destapar ningún spoiler aunque me tope con uno de golpe y la verdad es que me destripó parte de la emoción del 3x16 de la serie. Pero intuyo que esta finale de temporada ha decepcionado bastante al personal y no entiendo por qué. Esta temporada ha tenido más drama que nunca, mucho diálogo y mucha introspección, la falta de acción y zombies hacía que muchos fans de la saga, entre ellos mi querido marido, se quejaran de que la serie perdía parte de su encanto. Pero yo creo que era todo lo contrario, este cambio le propinaba a la serie más personalidad, de hecho ganaba con él, porque TWD nunca ha sido una serie de zombies al uso y en esta temporada se ha hecho plausible la frase que popularizó Hobbes, el hombre es el lobo del hombre, sin duda su peor enemigo, mucho peor que cualquier apocalipsis zombie. No ha habido una batalla final contra los muertos vivientes como en el final de la segunda temporada,

Semana Santa de 4.

Nuestra primera Semana Santa de cuatro ha sido francamente genial. Me la he pasado yo y los dos peques en el pueblo todos los días de vacaciones y mi marido iba subiendo a dormir cada noche porque durante los días laborales trabajó. Tanto tiempo sin disfrutar de mi tierra, de mi gente, de mi familia, ha supuesto que estos días los haya valorado y aprovechado al máximo. Salir a pasear y ver caras conocidas todo el tiempo, recibir visitas, espaciadas eso sí, y muchos regalos útiles, todos ellos. Conocer a los bebés de dos de mis amigas que también han sido mamás recientes. En fin que ya echaba de menos estar en mi salsa, porque yo allí estoy en mi salsa. Yo era feliz pero el que sin duda ha disfrutado más de todos ha sido mi hijo mayor, a él el pueblo le encanta, jugar en la calle, encontrarse con sus amigos, dormir con su yaya (mi madre), jugar con su tía favorita (mi hermana), vamos que ha sido el sumum y sólo me pedía que en lugar de quedarnos 10 días nos quedásemos 50, jaja, no es

El lado oscuro del porteo.

Portear es maravilloso, sentir a tu bebé pegadito a ti, su respiración pausada, sentir su olor, darle un beso en cualquier momento, tener las manos libres, los oídos también libres de lloros de fondo, portear es un bálsamo que una vez descubres crea adicción, que me lo digan a mí que estoy amortizando mi Emeibaby a tope. Pero amigos en estos bucólicos momentos siempre hay un pero como una casa y ese pero es la caca volcán, veáse al churrete de caca líquida de lactante que sobresale por los bordes del pañal manchando la ropita de la mama de bonitas cacas amarillas o verdes, según le bienparezca al amoroso bebé, y dejando un olor imborrable de la camiseta de su progenitora, o la otra opción es el vómitus ininterruptus, es decir el reflujo maravilloso de leche agria que nuestros dulces tesoros sacan por su boquita y que imprengnan mis rizos dejándolos con más apelmazamiento que cualquier Gel Fructis Style que se precie, xddd!!!!  Pero como nada importa porque el amor de tu bebé puede

Retornos primaverales y mi nostalgia.

Esta semana llegó la primavera y con ella regresan dos de mis series de cabecera, en AMC Mad Men, y en HBO, Game of Thrones. Ya desde hace un tiempo vivo sin vivir en mí cuando regresan ambas series porque soy fan, muy fan de ambas. Este año además es especial porque estas dos series eran las favoritas de mi padre, el año pasado al fallecer en junio no las acabó de ver y ahora sólo espero que allá donde esté las pueda disfrutar. Me emociono al pensar que veré cada capítulo pensando en él, será inevitable, porque cada semana los comentábamos juntos y ahora ya no podré seguir ese ritual. De hecho el año pasado lloré viendo el fabuloso capítulo de la batalla del Aguasnegras de Game of Thrones pensando en lo bien que se lo habría pasado él con un espectáculo así. Y también lloré viendo la finale de la quinta temporada de Mad Men porque sabía que él cada año lamentaba que la serie tuviera tan pocos capítulos, se le hacía corta, como a mí. Ahora cada vez que empiezo a ver una serie nueva

Mis dos últimos descubrimientos imprescindibles de puericultura.

Con mi hijo pequeño he descubierto dos piezas imprescindibles de puericultura con las que no contaba al nacer mi hijo mayor pero que ahora me están facilitando mucho la crianza. La primera es el móvil de la cuna grande, cuna que no uso para nada, evidentemente mi bebé o duerme en la minicuna o en nuestra cama de matrimonio, o en la hamaquita, pero no en la cuna que está montada en su habitación y luce muy bonita pero nada más. La cuna es la que el peque ha heredado del mayor evidentemente y está montada por si las moscas, pero con el mayor la usé más bien poco, así que cuando unas amigas me regalaron un bonito móvil de cuna musical lo monté allí un poco incrédula. Ellas aseguraron que era una maravilla así que un día decidí poner allí al bebé con la musiquita y oye mano de santo al nene le encanta pasar un ratito embobado con las luces y la música, una bendición! Lo relaja que no veas. Y a mí por ejemplo me permite ducharme sin estar a punto de partirme la crisma en el intento porque

Nucky Thomson, "the last boardwalk hero".

Mi padre me lo contó tiempo antes de morir, me dijo: "Cariño tú que aprecias la trilogía de El Padrino, no puedes perderte Boardwalk Empire." Y la verdad es que llevaba tiempo queriendo ver esa serie, a sabiendas que como con anteriores recomendaciones de mi padre, como The Wire, no iba a defraudarme, mi padre me conocía muy bien. Y antes de Navidad con el parón de series típico del momento mi socio y yo nos pusimos en faena. Lo bueno de conocer a su protagonista Nucky Thomson en los tiempos que corren es que te das cuenta de que las cosas tampoco han cambiado tanto desde los años 20, los felices años 20 de la Ley Seca americana en la que se desarrolla la serie y que sirvieron de cuna para la procreación de la mafia, tanto en Chicago, la ciudad de la mafia por antonomasia, como en Nueva York, o Atlantic City, ciudad donde acontece prácticamente la mayor parte del argumento de la serie. De hecho aquellos años de alegría económica fueron los predecesores del fatídico "C

Las amistades 2.0.

Podía intuirlo por sus blogs, o por sus comentarios twitteros pero la verdad es que ha sido gracias a un par de posts, justo  éste y éste , cuando esta semana he conocido mucho mejor la maravillosa relación de una tribu 2.0 muy particular y su particular manera de demostrarse su sincera amistad a través de una manta de patchwork. Y eso me ha hecho plantear como realmente la vida 2.0 a veces depara sorpresas maravillosas y permite conocer a gente increíble con la que se conecta mucho mejor que con la que nos toca lidiar en nuestra vida 1.0 muchas veces. En realidad como digo llevo largo tiempo siendo bloggera y todo empezó por los ánimos de mi mejor amiga 2.0, Pi, que con su blog , me animó a ponerme con este mío en diciembre de 2006, no ha llovido ni nada desde entonces. Ella vive en Girona y yo en la provincia de Tarragona, y nos conocimos un tiempo antes en un chat divertidisimo de cine en el que jugábamos a adivinar películas, un vicio total pre-Apalabrados y Whatsapp. En el vera

El sexo cuando hay hijos, mi experiencia.

Esta semana he podido leer dos interesantes posts sobre el sexo después de tener hijos, uno aquí , y otro aquí . Los dos son muy completos, uno más personal y el otro más divulgativo, de hecho este último además de describir perfectamente muchas de las cosas que he vivido en primera persona, aporta soluciones que en mi caso veo ciertamente impracticables primera porque todas ellas parten de la premisa de buscar momentos para la pareja y eso es hoy por hoy muy complicado. Al menos yo soy incapaz de irme tranquila a echar un polvo con mi marido y dejar a los peques con la abuela, ni mucho menos irme un fin de semana o unas vacaciones en plan pareja, la verdad, los dejo encantada si tengo compromisos de trabajo, o asuntos médicos, pero no me relajaría dejando a mis hijos para tener sexo, no va conmigo. Ya lo conté muy bien aquí , en un post del año pasado, y no quiero repetirme sin necesidad, pero es cierto que para mí quedarme embarazada y tener hijos si bien ha sido lo mejor que me ha

El control de esfínteres tardío.

Pasado el susto de la prueba del talón de mi hijo pequeño esta semana estoy feliz como una perdiz. Cuando uno recibe un susto así se da cuenta de a veces se preocupa por verdaderas tonterías y no valora lo esencial de la vida que es la salud de las personas que más quiere. Tengo que dar gracias porque realmente tengo una familia maravillosa. Y ahora quiero entrar al trapo con un asunto del que llevo tiempo queriendo hablar de nuevo. Ya conté en el pasado y en muchas ocasiones como el control de esfínteres de mi hijo mayor ha sido y sigue siendo con casi cinco años un suplicio. El pipí lo controló a tres meses de cumplir los tres años y como siempre digo en el momento en el que él quiso y se sintió cómodo y preparado. El verano anterior lo habíamos intentado con dos años recién cumplidos por prescripción de la guardería y fue un auténtico fracaso.Yo era una mamá novata y poco experimentada que accedí a quitar el pañal a mi hijo cuando en la guardería me lo recomendaron, aún sabiendo

Angustiada.

La entrada que he publicado esta mañana estaba programada, era una entrada frívola que para nada tiene que ver con mi estado de ánimo de hoy. Ayer a la una del mediodía recibí la temida llamada del Clínic de Barcelona. Como temía la segunda prueba del talón estaba alterada también. El marcador afectado era el de fibrosis quística  (FQ). Enseguida me dieron un teléfono del Hospital Sant Joan de Deu para conseguir cita para que le hagan el test del sudo r a mi bebé. Llamé inmediatamente y tengo cita para este próximo lunes. La angustia se ha apoderado de mí otra vez. Hace unos días ya escribí aquí sobre lo preocupada que me quedé con la repetición de la prueba, pero ahora con esta segunda prueba alterada estoy muy muy angustiada. Sé que si mi bebé está enfermo ya no hay nada que hacer. La enfermedad es incurable. Y la esperanza de vida relativamente corta. Sé que si el test es positivo empezaremos una dura lucha el próximo lunes para que mi hijo pequeño tenga una calidad de vida lo más

Qué vida más "triste"!!!

Yo en twitter no sigo a muchas celebrities, no porque prefiero seguir a gente con chicha, que diga algo de sustancia en sus tweets, así que realmente tengo una lista de "siguiendo" variopinta e interesante, desde mamás y amantes de la cocina, pasando por economistas, periodistas, cinéfilos, seriéfilos y locos por los geeks tecnologicos. Pero en instagram es harina de otro costal, ahí me ha dado por seguir a lo que hoy en día se conoce como "it girls" o chicas que marcan tendencia, por eso de que también tengo mi vena voyeur y aunque no pueda permitirme ni un calcetín de los que ellas se calzan, me alucina ver como combinan ropa muchas veces realmente extraña para parecer cool al tiempo que pienso que yo parecería un pato mareado con ese mismo look. Juzgad sino: Esta es  Miraduma , bueno éste es su nick, Miroslava Duma se llama, que es la "it girl" rusa del momento, editora de Harpers Bazaar en su país y periodista freelance de moda. Su vida, o mejor d

Nadie como él.

No he tenido tiempo de ver las películas nominadas este año a los Oscar, de hecho de las nominadas en la categoría principal sólo he podido ver Django Desencadenado, porque es de Tarantino y Tarantino se merece mi atención aunque no tenga tiempo para otra cosa desde que soy mamá de dos. Ahora supongo que veré Argo, ya me apetecía antes verla y ahora que es la mejor película del año según la Academia, seguro que la veo, y Lincoln, porque Spilberg aunque chochee muchas veces sigue siendo Spilberg y se merece mi respeto. Y ya veremos qué más puedo ver. Amor me apetece mucho también. Porque ahora con un bebé que no me deja dormir por la noches a pierna suelta aguantar tan solo una simple sitcom sin cabecear es casi misión imposible. Si hasta los capítulos de mi serie del momento, Boardwalk Empire, me toca verlos a días en dos partes, xdddd!!! Pero no quería hablar de esto ahora, quería contar que estos Oscar han sido los primeros sin mi padre, sí mi padre, ese papá cinéfilo que yo tenía q

Mamá babeante.

Ayer tuve la tutoría anual con la profesora de mi hijo mayor y he de confesar que iba recelosa y con miedo porque este curso, en casa en concreto, mi hijo ha estado más alterado de lo habitual, considerando que él en general ha sido siempre muy buenazo, hecho que yo misma he relacionado con mi embarazo y la llegada del hermanito, así que imaginaba que en clase la actitud habría sido similar. Y nada más lejos. Su tutora me explicó pormenorizadamente los ítems y objetivos que habían estado trabajando en clase y cómo él los iba alcanzando adecuadamente para su edad, hasta ahí bien, pero no fue eso lo que más me hizo sentir orgullosa de mi pequeño. Lo que realmente me hizo babear fue escuchar de boca de su profesora lo buena persona que es, un trozo de pan lo definió, que es un referente en su clase precisamente por ser comprensivo y paciente. Que es tranquilo y peca de tímido, tal vez inseguro, pero que por lo demás su actitud es de 10. Y babeé porque creo que en esto su padre y yo tenem

Criar con apego o cómo ser un bicho raro....

Con mi primer hijo estaba llena de dudas, inquietudes e incertidumbres normales y habituales en cualquier mama novata. Buscaba en internet, consultaba a amigas, a familiares, me volvía loca con unas opiniones tan dispares a otras en temas tan básicos o cotidianos como las horas de sueño, la alimentación, o la higiene. Llegué a tener tantas dudas que al final me di cuenta que tenía que seguir mi instinto o sino me volvería majara. Pero me costó lo suyo. Por ejemplo con el tema de los brazos. Pongámonos en situación. Una tarde en mi casa con visita de familiares, el peque acaba de tomar el pecho, está casi dormido pero cuando llegan los familiares empiezan con las carantoñas y como quieren verle los ojitos no dejan que se acabe de dormir. El peque se cabrea, normal, prueba tú a que no te dejen echarte la siesta que tanto necesitas y ya verás qué buen humor se te pone, y acaba llorando. La mamá, o sea yo, coge rauda y veloz a su bebé de la minicuna para darle besitos y calmarlo. Y ahí en

Mama de dos.

Aunque este primer mes ha sido un poco extraño con la inquietud, que aún sigue porque no tenemos los resultados en mano, de la repetición de la prueba del talón, y también con el tema de la posible displasia de cadera, de la que sabemos que es muy leve pero que hay que seguir controlando, la verdad es que me ha pasado volando y en realidad me he dado cuenta que ser madre de dos es todavía mejor que ser madre de uno. No voy a contar un cuento de hadas, hay momentos en los que tienes al pequeño desnudo a punto de meterlo en la bañerita y el mayor te grita desaforado que acaba de volcar el plato de sopa en la cocina, y entonces desearías ser la oveja Dolly clonada para poder atender ambos frentes. También desearías duplicarte cuando los dos requieren su dosis de amor y mimitos de mamá, porque eso sí el mayor está con una "mamitis" desaforada y yo por supuesto estoy encantada con esto, de ahí que disfruto a tope de esos momentos en el sofá con bebé en el pecho y mayor apoyado en

Repetición de la prueba del talón.

El lunes una carta me dejó muy preocupada, era del Clínic de Barcelona y me decían que había que repetir la prueba del talón de mi bebe para completar resultados. Como hago siempre, y no debería hacer nunca, me puse a buscar en google qué podía implicar y claro allí me salieron todas las plagas bíblicas y como madre no veáis lo histérica que me puse.  Para explicar mejor en qué consiste la prueba y qué enfermedades detecta enlazo el post al respecto que la Dra. Amalia Arce escribió en su interesante blog , si lo leéis imaginaréis lo fatal que que me quedé ante la situación. Aquella misma tarde tenía consulta con el pediatra para la primera revisión y se lo comenté, no era mi pediatra de cabecera sino un sustituto, que revisó al niño y trató de tranquilizarme, pero con cierta frialdad la verdad. Un rato después eché mano de parte de mi tribu de mamis twitteras y ahí sí obtuve apoyo reconfortante, también por parte de la propia Amalia Arce que me envió un mail enseguida para responder

Somos 4!!!!

Desde el 18 de enero de 2013 somos cuatro en casa. Sí por fin nació mi segundo hijo, mi bombón como le llamo cariñosamente. Es un niño precioso y como ya debí suponer le adoro desde el primer momento en que le vi. Como toda madre repetidora me preguntaba si podría querer tanto a un nuevo hijo como quiero a mi mayor, a mi tesoro, pues bien las madres debemos tener una reserva especial de amor incondicional para nuestros hijos que se carga automáticamente con cada embarazo. El parto fue de película, bueno tal vez exagero, pero fue mucho mejor que el primero y con diferencia. El tener claro lo que no quería, y el saber bien lo que deseaba en esta ocasión, me puso las cosas mucho más fáciles. Con el parto de mi mayor rompí aguas y me provocaron con oxitocina las contracciones, fue un parto largo y pesado, luego llegó la epidural que me la pusieron en dosis excesiva, ni siquiera notaba las piernas, resultado una dilatación aún más lenta, y una expulsión poco exitosa que tuvo que ser reforz