Ir al contenido principal

Confesiones íntimas I.

Releyendo mi primer post del año 2007 me he dado cuenta de que ha quedado tremendamente trágico, sí ya lo sé, si lo he escrito es porque simplemente he querido reflejar en mi blog y bajo mi prisma personal las duras realidades que han azotado el panorama mediático en estos últimos días. Pero como tampoco me apetece que esto quede tan terrorífico y de momento aquí en mi blog sigo mandando yo, pues voy a contrarrestar los efectos del anterior post con una nueva entrada que inaugura una serie de escritos que iré insertando poco a poco y de un modo espaciado sobre aquellas pequeñas confesiones "inconfesables" de mi vida: hechos, gustos o afinidades que me harían tal vez sonrojar un poco si debiese contarlos con vosotros de cuerpo presente. En primer lugar y a tenor del programa navideño especial que emitieron en CUATRO el viernes pasado (Lunny ya te dije que alguno de esos iba a acabar viendo yo) os confesaré que..... mi película favorita de Disney también es EL REY LEÓN, y hasta ahí bien, de hecho en las votaciones que realizaron en el susodicho especial navideño la mayoría de los espectadores estaban de acuerdo con mi criterio, cosa que me hizo pensar o que soy tremendamente vulgar o que mi buen gusto está más que contrastado, de hecho fue la película elegida en el puesto número 1 de la lista. Y no sólo eso muchos críticos han coincidido en que es una de las mejores historias que la factoria Disney ha sabido llevar a la pantalla, una bonita y original versión del clásico de Shakespeare, Hamlet. Pero es que hay más, sí, lo peor es que cada vez que la veo lloro, en efecto, es la película que más veces me ha hecho llorar en mi vida. A la mayoría de los mortales les pasará con la pérdida de Chanquete o con la trágica escena del asesinato de la madre de Bambi, no sé, pero a mí no, a mí la que verdaderamente me hunde en el más absoluto y desconsolador llanto es la imagen del padre de Simba cayendo sin vida ante la embestida de los "secuaces" del malvado y abobinable Scar. Y no puedo evitarlo, si la he visto veinte veces, las veinte he llorado como una quinceañera ante David Bisbal, en fin tanto que ya no quiero ver la película acompañada. Estos momentos de sensiblería ñoña he decidido que es mejor disfrutarlos en soledad. Ya veís, todos tenemos secretos y éste es uno de los míos. Otro día más...

Comentarios

Duna ha dicho que…
A mí , ya habrás podido apreciar, me encanta también El Rey León. El momento mayor para mí es de la canción de 'el ciclo de la vida', cuando el padre muestra a Simba a su reino...el orgullo que me invade en esos instantes me anega y me emociona. La canción, por otra parte, en cuestión, me lleva a un momento muy duro en mi vida, motivo por el que también lloro.

Vamos, que si la vemos tú y yo juntas consumimos íntegra la caja de kleenex XD
3'14 ha dicho que…
Si te consuela, la fui a ver al cine en su estreno, y la escogió el chico con el que salía entonces, mayor que yo, un estudiante de ingeniería, rudo y jugador de basquet (vale no lloró, pero se emocionó muchísimo)... A mí me gustó, pero un episodio lacrimógeno de Friends me puede hacer llorar más que esta peli, y esto sí es toda una confesión digna para ser llevada a un paredón de fusilamiento :)
Arual ha dicho que…
Bueno Monologuista la verdad es que esa escena de la que hablas con la canción de Elton John de fondo es preciosa también, toda la peli es una "pocholada"... Bueno bueno no sigo que lloro.
Por cierto Pi si te han de llevar al paredón por llorar, disfrutar o reir con la estupenda Friends a mí me llevaran contigo porque es una de mis series favoritas, por no decir, la favorita, y no me avuergüenzo ni pizca de ello.
Harry Reddish ha dicho que…
A mí, que soy un friki de la política me gustó "El Rey León" por toda la carga simbólica que hay detrás de una película como esta. Puestos a analizar y a buscarle tres pies al gato (al león en este caso) se le puede sacar mucho jugo. De hecho hay tesis doctorales en torno a la simbología de esta película. La historia de Simba está basada en lo que ocurrió en un país africano.
En cuanto a lo de llorar con las pelis, reconozco que se me saltan las lágrimas con "Ghost" y es que me da mucha pena Patrick Swayze.

Salud!!
Arual ha dicho que…
Vaya vaya Harry puestos a pensar sí que es posible que EL REY LEÓN de para mucho, hasta para una tesis doctoral como tú dices, y es que lo de Scar es alta traición, no me digas, es llevar el tema de la oposición al gobierno hasta extremos insospechados, un poquito lo que viene haciendo Rajoyin, pero éste sin llegar la sangre al río. Y luego lo que tiene que aprender Simba para ser un buen gobernante, alejarse de su tierra y volver para amarla más si cabe, aunque él no sepa que a la vuelta será el líder, no como ha hecho "Ansar" que se ha ido después. Y qué me dices de su primera dama Nala tan despierta e inteligente, una Hilary Clinton pero en leona. Por no hablar del famoso ciclo de la vida, y el respeto por los ciudadanos. No me había parado jamás a pensar tantas cosas sobre esta película hasta hoy, será porque siempre me anegaba en lágrimas y hasta me costaba respirar, pero bueno ha sido una interesante aportación Harry. Gracias!

Entradas populares de este blog

No pudo ser.

Breve post para contaros que se ha interrumpido involuntariamente mi deseado embarazo. Volveré cuando esté un poco mejor... Ahora no tengo palabras.

Despertar de nuevo...

Abro los ojos de nuevo al mundo, despierto de una especie de ensoñación o pesadilla más bien, donde el mundo, mi mundo, se estaba desmoronando. Miro hacia mi alrededor y todo sigue bien. Mi sobrino es un bebé sano y regordete que no necesita estar conectado a una máquina y puede salir a pasear cada día por la calle. Nadie lleva mascarilla. No ha habido una avalancha de muertes inesperadas. Puedo abrazar a mi amiga después de un día duro para darle ánimo y nadie me mirará con cara de reprobación. Puedo planificar mi próxima escapada a un concierto, o mi próximo viaje, y no necesitaré un PCR negativo. No hay toque de queda. Puedo ver salir el sol. Comer una hamburguesa en la calle está bien. Hacerlo en una terraza también. No conozco el concepto distancia social. Lo más hidroalcohólico que tengo es el último gin tonic que tomé el sábado pasado. No hay pandemia. Y no he cometido ningún estúpido error. No he visto la cara B de la vida y no quiero verla.  Pero desde mayo tengo una sonrisa 

Burning night.

Voy falta de sueño, bueno de sueño y de muchas otras cosas, y puede que eso nuble mi entendimiento, como la solteras nublan el entendimiento de Carlos Baute y lo dejan colgado no precisamente en sus manos cada tarde en esa cosa que se parece a un programa pero que la verdad no acabo de entender muy bien que es y que se llama ELÍGEME. ¿Pero Carlos Baute no prefería a los estibadores portuarios? Siempre lo había creído así pero viendo como desnuda con la mirada a las mocetonas que entran en su plató tengo una duda más que considerable al respecto. En fin a lo que íbamos que tengo la cabeza un poquito atolondrada (ufff esta palabra que acabo de usar era la favorita de la Hermana María, mi profe de mates de 8º EGB, así de repente me ha venido un flash de su imagen a la cabeza, no os digo que no estoy fina...) y puede que eso haga que ande un poco monotemática, pero tenéis que perdonarme, I'm happy, so happy, y no se me puede aguantar, I know. Y es que esta noche... VAMOS A QUEMAR MESTA