Tranquilos todos, no me pasa nada grave, pero el título va a colación porque llevo unos días que parece que no doy pie con bola. Me encantaría decir que estoy centrada, que puedo con todo, pero la verdad es que la mayor parte de las veces la presión puede conmigo y entonces vienen rachas como ésta. Mi hijo tiene gripe, esto no es nada extraordinario, medio país está igual. La verdad es que por suerte la ha pillado bien floja, poca fiebre, mucho moco, y algún episodio de diarrea, pero nada comparado con los síntomas que han presentado algunos de sus compañeros de guardería sin ir más lejos. Lo que sí tiene es tos, y como no tos nocturna, eso impide que el pobre concilie el sueño, que lo conciliemos su padre y yo, y la falta de descanso deriva directamente en mal humor y en mi caso también, falta de concentración a todos los niveles. Además hace un par de días su virus o cualquier otro decidió hacer acto de presencia en mi cuerpo y de ahí que ayer amaneciera yo más muerta que viva y con una gastroenteritis de esas de no menearse del cuarto de baño, no hacen falta más detalles, ¿verdad? Menos mal que el peque ya estaba mejor y pudo ir a la guardería con lo que en cierto modo pude "disfrutar", si a esto se le puede llamar así, de un relajado día en casa, en intimidad, yo, yo misma y mi wc. Pero dejemos el lado escatológico y pasemos al día de hoy. Esta mañana ni todo lo recuperada, ni todo lo descansada que corresponde, pero arrastrada por la impetuosa necesidad que hay en mi empresa de mí (abro paréntesis, ja, ja, cierro paréntesis) me he ido a la oficina, y para rizar el rizo he tenido un accidente de tráfico. Nada grave, estoy bien y el único malparado ha sido el frontal de mi coche, pero el susto no me lo ha quitado nadie. Cuando he llegado al trabajo era difícil determinar si el blanco nuclear de mi cara se debía al susto por el choque con el coche o por las secuelas de mi reciente convalecencia. En fin que como veis he acabado la semana, en lenguaje muy vulgar, dpm. Y espero de verdad que esto se quede así. Porque aún queda el fin de semana por delante para darme más "alegrías".
Todo esto me pilla en un momento un poco delicado anímicamente hablando, justo el miércoles por la noche una compañera de trabajo embarazada de 7 semanas tenía un aborto espontáneo similar al que sufrí yo antes de quedarme encinta de Alex, y similar también al que ella misma había sufrido tiempo atrás. Ni que decir que esto me hizo pensar mucho otra vez en mi idea de volver a ser madre y lo probablemente complicado que resultará para mí. Sé que esta afirmación es una soberana idiotez, pero no puedo evitar darle vueltas a mi anterior experiencia: tantos meses intentándolo, el hecho de conseguirlo y sufrir el aborto, después otra vez a la carga, más meses obsesionada con el tema y por fin... milagro... test positivo y embarazo con final feliz. Hasta hace bien poco no quería ni hablar de momento en repetir maternidad, pero últimamente sí que me lo he planteado, aquí en mi blog hay pruebas fehacientes de ello, y sinceramente, tengo que reconocerlo, me da mucho, muchísimo respeto. Qué complejo es todo!
Comentarios
Espero q el finde sea tranquilito y no te de mas sustos.
Yo también ando con el pensamiento de un segundo embarazo y aunque en mi caso mi embarazo anterior fue muy fácil me da miedo cualquier contrariedad q pueda perturbar el bienestar y felicidad de Julito.
Ya verás como cuando te recuperes del susto y de la gastroenteritis ves todo, incluso lo del posible futuro embarazo mucho mejor.
Ánimo!
Y no me extraña que te dé el bajón con eso que acertadamente has llamado una serie de catastróficas desdichas (me alegro de que el accidente haya sido sólo un susto...). Pero habrá días mejores y entonces lo verás todo de otra forma.
Ánimo!, en cuanto os recupereis y consigais descansar un poco ya verás como lo ves todo de otro color (y sino unas buenas gafas de sol ;-))
Pues sí Teta pero el finde en el pueblo me ha reconfortado, hoy lunes veo todo de otro color.