Las vacaciones ya he comentado alguna vez no le sientan bien a mi hijo. Creo que visto desde su perspectiva sería mejor que se abolieran para siempre, aunque Fernandez Toxo y compañía no sé qué dirían al respecto, pero tal como se han puesto con la jubilación a los 67 me imagino que pocas cosas bonitas.
Ya he ido comentando lo mal que duerme mi hijo últimamente por la esfera blogger y el sueño que estoy pasando como consecuencia. Café no hay suficiente en Colombia para que una servidora ande medianamente despierta durante su jornada laboral. Pero la cosa ha empeorado con las vacaciones. Da igual que lo acueste a las nueve, que a las diez, que a las once, a las tres o tres y media a más tardar se despierta y ya la hemos liado. Me acuesto a su lado, le doy agua, le doy un beso, un abrazo, le dejo una luz suave abierta, todo lo imaginable, exceptuando las técnicas del Dr. Estivill claro, lo pruebo, bueno lo probamos mi marido y yo. Pero ya no hay modo humano de que nuestro hijo logre conciliar el sueño de tirón, sus despertares empiezan a repetirse hasta la mañana siguiente, con el añadido de que al no descansar correctamente por la noche al día siguiente la falta de sueño le provoca un humor de perros considerable que acentúa sobremanera la famosa fase del "no" tan típica en sus dos años y medio, de los berrinches varios e incluso ha llegado a minarle el apetito, con lo comilón que suele ser él. En fin que llevamos una temporadita de noches toledanas y días interminables a la que no atisbo el fin. A 2011 como comprenderéis le he pedido al menos una ligera mejora porque esta situación sino va a acabar conmigo. Lo que no pasé con él de recién nacido me toca pasarlo ahora. Me lo cuentan y no me lo creo!
Ya he ido comentando lo mal que duerme mi hijo últimamente por la esfera blogger y el sueño que estoy pasando como consecuencia. Café no hay suficiente en Colombia para que una servidora ande medianamente despierta durante su jornada laboral. Pero la cosa ha empeorado con las vacaciones. Da igual que lo acueste a las nueve, que a las diez, que a las once, a las tres o tres y media a más tardar se despierta y ya la hemos liado. Me acuesto a su lado, le doy agua, le doy un beso, un abrazo, le dejo una luz suave abierta, todo lo imaginable, exceptuando las técnicas del Dr. Estivill claro, lo pruebo, bueno lo probamos mi marido y yo. Pero ya no hay modo humano de que nuestro hijo logre conciliar el sueño de tirón, sus despertares empiezan a repetirse hasta la mañana siguiente, con el añadido de que al no descansar correctamente por la noche al día siguiente la falta de sueño le provoca un humor de perros considerable que acentúa sobremanera la famosa fase del "no" tan típica en sus dos años y medio, de los berrinches varios e incluso ha llegado a minarle el apetito, con lo comilón que suele ser él. En fin que llevamos una temporadita de noches toledanas y días interminables a la que no atisbo el fin. A 2011 como comprenderéis le he pedido al menos una ligera mejora porque esta situación sino va a acabar conmigo. Lo que no pasé con él de recién nacido me toca pasarlo ahora. Me lo cuentan y no me lo creo!
Comentarios
Estoy igual, julio dormía mejor de bebe q ahora aunque hemos mejorado.
Hemos conseguido de momento q la cuna no tenga pinchos y sus despertares se han reducido a 2 mas o menos.
Lo normal es q con q vaya y le haga una carantoña se vuelva a dormir o si me lo tengo q llevar a nuestra cama pita md dice "una", me lo meto en la cama y a los 10 minutos q suele estar ya roncando lo vuelvo a llevar a su cuna donde suele quedarse ya hasta q le despierto x la mañana para ir al colé.
Ya no se lo q es dormir del tirón, pero es q no nos queda otra!!
Te mando mucho animo de ojera a ojera, jeje