Ir al contenido principal

Balanza.

Lo que me preocupa ahora....

- Haber acertado con el colegio elegido para mi hijo. Todavía no sé si va a entrar, hasta el próximo 15 de marzo no se publican las listas de admisión, pero como casi siempre que tomo una decisión importante en mi vida, las dudas vuelven a mí al cabo de un tiempo y me machacan. Desde luego lo elegí con convicción, para muestra un botón. Pero mi cabecita no para de dar vueltas al asunto y tengo miedo de haberla pifiado.

- Es la actitud de mi hijo con el control de esfínteres, sí ya sé que soy pesada con el tema, pero es que hay para ponerse pesada con esto y ahora veréis por qué. Sé que está perfectamente maduro en este aspecto porque a sus 32 meses en la guardería y desde hace un par de semanas hace todos los pipis en el wc sin problema y lleva el pañal seco todo tiempo que permanece allí, pero en casa sigue en sus trece, no quiere ni hablar de sentarse a mear en el wc ni de broma. Yo no le presiono porque ya lo hice el verano pasado y fue un desastre, una gran equivocación. Así que se lo pregunto como quien no quiere la cosa y cuando me dice que no, que es siempre, paso a otra cosa mariposa como si no me importara lo más mínimo. Pero aún así la gota que colmo el vaso de mi alucinación se produjo ayer por la tarde cuando fui a recogerlo y su tutora le comentó que se sentara a hacer pipi antes de irse a casa conmigo y él se negó en rotundo y se puso a llorar, pero no a modo pataleo, no, con sentimiento, buff, horrible, simplemente porque yo estaba delante. Creo que mi niño tiene un trauma conmigo y con el pipí muy gordo y realmente me abruma no saber cómo solventar esta situación. Dentro de un tiempo tal vez me reiré de todo este periplo pero hoy en día os juro que no le veo salida al tema.

- Es sobreproteger demasiado a mi hijo, mimarlo, malcriarlo. Yo no quiero someterle a reglas estrictas como si mi casa fuera un cuartel militar y no un hogar. Y trato de concretar en varios puntos para que se me entienda bien:
1.No le dejo llorar de noche, acudo a consolarle, y si hace falta lo acuesto conmigo. Me gusta que se sienta arropado y querido por mí y por su padre.
2.No le obligo a comer de todo, él afortunadamente suele comer bastante bien, bajo mi criterio, le gustan unas cuantas verduras, se come bien el pescado blanco, los dulces no van con él (esto es fantástico porque me evita muchas discusiones en el supermercado), la carne tampoco le pirra, le suele hacer bola, es un fan absoluto del arroz y de las sopas, en fin que creo que no come mal y no voy a ponerme "burra" porque no quiera tomarse un plato de espinacas a pelo si ya logro que los tome mezclados en el pure por ejemplo.
3.No tolero los azotes, prefiero dialogar con él o castigarle quitándole alguno de sus bienes más preciados, como la camiseta del Barça que le regalaron el pasado cumple y que es su tesoro. A veces tiene comportamientos totalmente inadmisibles, creo que ya os conté el susto que me dió el día que no quería irse del parque y en su ataque de "churro total" se me escapó y se plantó en medio de la avenida principal de mi ciudad en el justo momento en que el semáforo de peatones se puso verde, menos mal. Aún me entran ganas de llorar al recordar la agonía que pasé imaginándome lo que habría ocurrido si le hubiera atropellado un coche.
En fin que tengo motivos a veces para perder los nervios pero cuando los pierdo intento medir mi actitud. Pero por todo esto y mucho más no me paran de llover críticas, hasta mi madre me dice que mi hijo va a ser un malcriado, y llevo unos días en los que no paro de pensar si tal vez va a ser así, si realmente estoy "educando a un pequeño terrorista". Ayer leyendo este decálogo que colgó Superamatxu en su blog me di cuenta que el fondo del mismo me parece supersensato y coherente y me pregunté a mi misma otra vez si lo hago bien como madre, si me equivoco, si actúo bajo mis principios o me los salto demasiadas veces, si estoy en el camino correcto. Lo que es seguro es que estoy sufriendo una crisis de falta de confianza como madre importante. Y esto ahora mismo me preocupa muchísimo.

Lo que no me preocupa....

- Es seguir los horarios tan a rajatabla como antes. De bebito consideraba fundamental seguir unos horarios estrictos con el peque. Quitando la alimentación que siempre fue lactancia materna a demanda, no a cada tantas horas como hacían otras madres, lo demás iba muy pautado. Aquel control de rutinas me daba seguridad. Y hasta hace poco he de reconocer que el saltármelas me turbaba bastante. En cambio de un tiempo a esta parte y supongo que también por el hecho de que mi niño ya es más mayor he dejado de agobiarme con los horarios y si un día no me echa la siesta pues ya no me agobio. Disfruto de ese momento regalado con él y pienso que las tareas que me había propuesto para hacer mientras él durmiera ya las haré en otro momento. Sin ir más lejos este sábado no quería dormir su siesta y como hacía solete su padre y yo cogimos el andante y nos fuimos a disfrutar con él en el parque. No hay mal que por bien no venga.

- La alimentación equilibrada. Como ya he dicho, mi hijo no come de todo pero va comiendo bastante bien, así que mi obsesión por el equilibrio alimentario se ha difuminado bastante. Sé que no se alimenta de manual pero el niño crece de maravilla, está sano, y lo que come se lo come muy a gusto. He de añadir que tengo la suerte de que no sea fan de los dulces, el chocolate ni lo prueba por ejemplo, así que tampoco corro el riesgo de que se alimente a base de chuches solo porque él al igual que yo es más feliz con un trozo de pan recién horneado que con cualquier otra cosa.

- Las relaciones sociales. Este verano pasé un calvario con este tema. Mi hijo estaba en la fase de "todo es mío" y no quería compartir nada por lo que cada vez que íbamos al parque o nos juntábamos con los amigos que tienen niños o con sus primitas yo me ponía mala porque sabía que había "pitote" asegurado. Con el tiempo que todo lo cura esta actitud cambió y ahora aunque aún tiene momentos de esto es mío y no me lo quita nadie he visto como poco a poco mis lecciones de aprender a compartir han surtido efecto y ahora disfruto cuando lo veo feliz jugando con otros niños o resolviendo los conflictos él solito.

Comentarios

LA TETA REINA ha dicho que…
Ays madre mía, como te entiendo.
Anda que no me entran dudas a mi, pero eso sí, me callo. No aquí con vosotras pero con mis padres, cuñados, suegros, etc no digo ni "mu". Porque como vean que flaqueas entonces van a degüello.

Ya que he decidido de que manera hacer las cosas, tengo que ser consecuente y no decaer.
Caiga quien caiga.

Eso no quiere decir que si veo que hay que cambiar/mejorar cosas no lo hago, pues claro, siempre hay que irse adaptandose a todas las situaciones/condiciones que se den.

Pero es que a mi lo que más me mina es esa lucha constante con los demás.

Igual mi postura no es correcta pero es que he visto que cuando me muestro vulnerable, no veas como se crecen...

Las dudas son normales y si me apuras necesarias.
Es bueno tener las cosas claras pero yo creo que las dudas son tan buenas/necesarias como el miedo. Nos hacen tener los pies en el suelo.

Lo del control de esfinteres no te puedo decir mucho porque yo estoy en tu misma situación. En abril-mayo empezaremos con la operación pañal y yo no lo veo tan claro, es más me atormenta bastante, pero procuro pensar en ello lo menos posible hasta que se de la situación.

Como me dice Belén siempre, todavía queda mucho hasta septiembre...

Ánimo guapa!, yo creo que lo estás haciendo muy bien. Y te voy a decir por que, porque veo que la base más importante, que para mi es el amor, es sólida al 100%.

Recurramos al "son rachas" que son muy socorridas y siempre pasan ;-)
LA TETA REINA ha dicho que…
Ostrás vaya rollazo que te he metido. Sorry!
ha dicho que…
jejejeje, Querida Teta, me alegro que pienses en mi y en las cosas que te digo, qué mona mi niña, jejeje.
Arual, a ti te digo igual corazón, mucha paciencia, todo saldrá genial.
mamadejulio ha dicho que…
Pues me encuentro mas o menos como tu. Ando bastante preocupada estos días con el tema del control de esfínteres. Julito se sienta en el orinal pero no hace pis. Dice cd tiene pis o caca pero no le molesta en absoluto, hay hasta q negociar muchas veces para cambiarle.
Y no tengo no idea de como hacerlo sin q sea un fracaso total.

Tema parque, estoy como tu hace un año, en plena educación del compartir, q espero poco a poco de sus frutos.

Tema crianza tal y como la has descrito, literal. Ultimamente se esta portando fatal y como tu me pregunto si lo estoy haciendo bien. No obstante que nos queda?? No sabría como hacerlo de otra forma.

En fin q no md pillas en demasiado buen momento, jejé
Espero q las cosasvayan saliendo solas.
Anónimo ha dicho que…
Hola guapa! Yo creo que cualquier buena madre se preocupa y se pregunta si lo está haciendo bien. De quien desconfío es de quien se cree perfecta y que todo lo hace bien, fíjate.
Yo soy la primera que dudo. Ayer publiqué como tú dices el decálogo de Emilio Calatayud, pero yo soy la primera que creo que soy superprotectora. Sé que fallo ahí, pero me es imposible saber que algo le puede causar mal a una de mis hijas y no tratar de impedirlo.
En cuanto a no usar la violencia, creo que ahí sí que tenemos razón y que no por no dar azotes o cachotes a un niño se vaya a malcríar. Se le puede decir no de muchos modos, y estoy convencida de que no es necesario usar la violencia para ello.
Animo guapa!
En lo de los esfínteres no te puedo ayudar mucho, mis hijas ambas de día los controlaron muy pronto, pero por la noche a la mayor le costó bastante y la pequeña tiene pinta de seguir el mismo camino. Tras mucho insistir, de repente, sin más, se dejó de mear. Es como en su mente algo hubiera hecho un click y se dejó de mear.
Tu hijo tarde o temprano dejará de usar pañal, no te agobies, todo llegará: ¿a que no has visto a nadie con 15 años y que siga llevando pañal? Venga, ánimo!
Arual ha dicho que…
Teta a mí me duele en el alma que a veces sea mi madre la que me cuestione la forma de criar a mi hijo, sé que lo hace desde su propia perspectiva y experiencia, al fin y al cabo ella me educó a mí y tan mal no he salido, pero debe entender y respetar mis diferentes puntos de vista. Del resto de la gente paso bastante la verdad. Lo mejor es que aquí por el mundo blogger he podido encontrar a gente como vosotros que compartis gran parte de mi visión de la maternidad.
Respecto al pañal Belén tiene razón queda todavía tiempo pero es que me da miedo que los meses vayan cayendo y no avancemos en el tema. La entrada en el cole nos marca un límite que me agobia. De todos modos nos acordaremos de tu consejo Belén, seremos pacientes!!!!


Mamadejulio ánimo guapa!! Estamos en la misma pieza del baile me temo. Aunque el hecho que Julito quiera sentarse en el orinal ya es mucho, Alex ni de coña se sienta, vamos que es como decirle que le voy a sentar en una silla de tortura xddd!!!


Superamatxu ese es justo mi miedo, pasarme de sobreprotectora pero claro yo no sé actuar de otro modo, no me sale!

Entradas populares de este blog

No pudo ser.

Breve post para contaros que se ha interrumpido involuntariamente mi deseado embarazo. Volveré cuando esté un poco mejor... Ahora no tengo palabras.

Despertar de nuevo...

Abro los ojos de nuevo al mundo, despierto de una especie de ensoñación o pesadilla más bien, donde el mundo, mi mundo, se estaba desmoronando. Miro hacia mi alrededor y todo sigue bien. Mi sobrino es un bebé sano y regordete que no necesita estar conectado a una máquina y puede salir a pasear cada día por la calle. Nadie lleva mascarilla. No ha habido una avalancha de muertes inesperadas. Puedo abrazar a mi amiga después de un día duro para darle ánimo y nadie me mirará con cara de reprobación. Puedo planificar mi próxima escapada a un concierto, o mi próximo viaje, y no necesitaré un PCR negativo. No hay toque de queda. Puedo ver salir el sol. Comer una hamburguesa en la calle está bien. Hacerlo en una terraza también. No conozco el concepto distancia social. Lo más hidroalcohólico que tengo es el último gin tonic que tomé el sábado pasado. No hay pandemia. Y no he cometido ningún estúpido error. No he visto la cara B de la vida y no quiero verla.  Pero desde mayo tengo una sonrisa 

Burning night.

Voy falta de sueño, bueno de sueño y de muchas otras cosas, y puede que eso nuble mi entendimiento, como la solteras nublan el entendimiento de Carlos Baute y lo dejan colgado no precisamente en sus manos cada tarde en esa cosa que se parece a un programa pero que la verdad no acabo de entender muy bien que es y que se llama ELÍGEME. ¿Pero Carlos Baute no prefería a los estibadores portuarios? Siempre lo había creído así pero viendo como desnuda con la mirada a las mocetonas que entran en su plató tengo una duda más que considerable al respecto. En fin a lo que íbamos que tengo la cabeza un poquito atolondrada (ufff esta palabra que acabo de usar era la favorita de la Hermana María, mi profe de mates de 8º EGB, así de repente me ha venido un flash de su imagen a la cabeza, no os digo que no estoy fina...) y puede que eso haga que ande un poco monotemática, pero tenéis que perdonarme, I'm happy, so happy, y no se me puede aguantar, I know. Y es que esta noche... VAMOS A QUEMAR MESTA