La bolsa española experimentó la mayor subida de su historia, se recuperó, y en esos momentos yo con pena inmensa en el alma volvía a trabajar y dejaba a mi peque con la abuela. Sobreviví. Fue duro pero sobreviví. Al final supongo que todo vuelve a la normalidad, al final supongo que el sol vuelve, ¿verdad?
Te hablo de unas coordenadas. Te hablo de un punto en el mundo. En la tierra. Un punto de inflexión en mi vida. En tu vida. En la nuestra. Y un día de abril por la tarde dimos el paso. Ahora ya no hay marcha atrás. Hace 12 años que mi corazón late más fuerte de lo normal. A veces lo hace a un ritmo pausado pero cuando te siento mi pulso se acelera y ya no hay marcha atrás. No había sido mujer de flirteos jamás. De hecho creo que no sé flirtear. Y me ha desconcertado siempre que alguien intente flirtear conmigo. Pero recuerdo cuando tú empezaste a hacerlo conmigo tan directamente, en aquel entorno virtual que ahora me parece lejano y confuso. Tocaste mi fibra sensible hablándome de lo que sabes que me apasiona, el cine. Y quise huir. Me resistí. Sabía que no estaba bien. Pero qué es lo bueno y lo malo? Cómo puede ser malo algo que te hace sentir feliz? La distancia fue una bendición para salvar el peligro que suponía sentirme tan atraída por ti. Una vez nos acercamos...
Comentarios
Al principio se hace dura la reincorporación, pero te aseguro que esa pena que sentimos al "dejar" a nuestros hijos para acudir al trabajo es un sentimiento totalmente egoista. Ellos están bien, con la abuela, en la guardería, exploran otros entornos, otros mundos, aprenden cosas que en exclusiva con mamá o papá no podrían saber... así que, siéntete tranquila, y eso sí, aprovecha las ventajas que sean posibles, reducciones de jornada, etc... para pasar el rato que sea posible con tu hijo y aprovecharlo al 100%, pues no creo que sea tan importante el tiempo que pasamos con ellos si no cómo lo invertimos, lo que hacemos con ellos durante el rato que compartimos. Calidad ante la cantidad. Siempre.
Besos!
Este... que no pretendía llamarte egoista, eh?? Es algo que todas hemos sentido, pero no podemos abarcarlo todo, Aru, ser madres, esposas, amigas, trabajadoras... No por lo menos al mismo tiempo, por tanto debemos asumir y aprender a fraccionarlo sin tener remordimientos. ;)