Ir al contenido principal

Psicosis.

Últimamente tengo la sensación de estar viviendo permanentemente en la película EL SHOW DE TRUMAN, vigilada, controlada, maniatada, y que yo sepa no estoy en la cárcel. En mi empresa están aplicando ahora con rigidez dictatorial la maléfica, insisto maléfica, ley de protección de datos. Circulares amenazantes, contínuas visitas y auditorias informáticas, documentos comprometedores de confidencialidad que firmar, millones de papeleos, trámites y memorización de contraseñas que han provocado en casi todos los empleados de la entidad una neura impresionante, y la mirada constante y amenazadora de la responsable de seguridad que vigila a lo lejos en el horizonte todo el tiempo. He borrado todos los correos de mi mail, he limpiado mis carpetas de trabajo del pc con una precisión jamás vista, me he empollado cada documento, y mi psicosis es tal que creo que tecleo una contraseña hasta al abrir el frigorífico. De noche sueño con códigos alfanuméricos, igual mi niño nace matemático por lo menos, y de día tras cada paso que doy no hago otra cosa que pensar si será seguro o no. Chicos mi mente va a estallar! Vigilad que no os salpique!

Comentarios

Sett ha dicho que…
Que rabia me da a mi en el trabajo,cuando dejo de teclear durante dos minutos o no toco el raton ya se me bloquea el pc.

Es horrible! Luego a meter dos contraseñas,y a esperar que confirme datos...

Por cierto,forastera,ya se te empezaba a echar en falta....
Unknown ha dicho que…
Eso más bien parece el show de Trautman (el coronel).. dios mío, no siento los datos, estoy rodeado de claves... jajaja
ay, como te salga informático ya vas a ver tú! jajaja
Salud!
Juan Rodríguez Millán ha dicho que…
Tú ni caso... Que se psicoticen los demás... Si al final el peque va a hacer lo que quiera, je, je, yo no me plantearía todavía su carrera que le faltan unos cuantos años y muchos, muchos pasos...

Yo todavía me acuerdo cuando en mi ex empresa, un medio de comunicación, decidieron caparnos Internet. ¡Y no se podía entrar ni en las páginas de algunos periódicos! En fin, la inutilidad manifiesta, que se propaga sin remedio...
Anónimo ha dicho que…
hace tiempo que la vida en los paises supuestamente civilizados, se nos somete a invasiones de nuestra privacidad, con el objeto según las autoridades de protejernos, jejee, el hecho es que quieren tenernos controlados, no sea que les salgamos díscolos
Lena ha dicho que…
Un beso guapísima!

Entradas populares de este blog

Burning night.

Voy falta de sueño, bueno de sueño y de muchas otras cosas, y puede que eso nuble mi entendimiento, como la solteras nublan el entendimiento de Carlos Baute y lo dejan colgado no precisamente en sus manos cada tarde en esa cosa que se parece a un programa pero que la verdad no acabo de entender muy bien que es y que se llama ELÍGEME. ¿Pero Carlos Baute no prefería a los estibadores portuarios? Siempre lo había creído así pero viendo como desnuda con la mirada a las mocetonas que entran en su plató tengo una duda más que considerable al respecto. En fin a lo que íbamos que tengo la cabeza un poquito atolondrada (ufff esta palabra que acabo de usar era la favorita de la Hermana María, mi profe de mates de 8º EGB, así de repente me ha venido un flash de su imagen a la cabeza, no os digo que no estoy fina...) y puede que eso haga que ande un poco monotemática, pero tenéis que perdonarme, I'm happy, so happy, y no se me puede aguantar, I know. Y es que esta noche... VAMOS A QUEMAR MESTA

No pudo ser.

Breve post para contaros que se ha interrumpido involuntariamente mi deseado embarazo. Volveré cuando esté un poco mejor... Ahora no tengo palabras.

Despertar de nuevo...

Abro los ojos de nuevo al mundo, despierto de una especie de ensoñación o pesadilla más bien, donde el mundo, mi mundo, se estaba desmoronando. Miro hacia mi alrededor y todo sigue bien. Mi sobrino es un bebé sano y regordete que no necesita estar conectado a una máquina y puede salir a pasear cada día por la calle. Nadie lleva mascarilla. No ha habido una avalancha de muertes inesperadas. Puedo abrazar a mi amiga después de un día duro para darle ánimo y nadie me mirará con cara de reprobación. Puedo planificar mi próxima escapada a un concierto, o mi próximo viaje, y no necesitaré un PCR negativo. No hay toque de queda. Puedo ver salir el sol. Comer una hamburguesa en la calle está bien. Hacerlo en una terraza también. No conozco el concepto distancia social. Lo más hidroalcohólico que tengo es el último gin tonic que tomé el sábado pasado. No hay pandemia. Y no he cometido ningún estúpido error. No he visto la cara B de la vida y no quiero verla.  Pero desde mayo tengo una sonrisa