Después de estos días extraños no sabía como volver a postear. Me plantaba delante de la pantalla, en la opción de "creación de entradas" y no había manera humana de teclear nada. Me sentía vacía, sin inspiración, perdida. Y bueno como lo que sí me gusta ser es sincera he decidido al fin escribir sobre lo que me pasaba, confesar mi fuga de musas. Y es que al fin y al cabo este blog se ha convertido en un pulso anímico de mi vida, como una especie de termómetro que capta la temperatura de cada uno de mis momentos, de los buenos y de los malos, y no quiero cambiar tampoco esta filosofía.
Por eso tengo casi obligación moral de contaros que sigo aquí, un tanto ausente, pero sigo aquí. Que mi pequeño sigue conmigo, con sus pataditas vitales, con su particular modo de comunicarse conmigo, que me voy sintiendo a gusto, que empiezo a enfocar los problemas con una luz distinta, que estoy mejor.
También añadir que os he seguido en silencio estos días, que he ido visitando vuestros blogs, muchas veces sin comentar nada, porque hay veces que ese silencio es la mejor palabra. Y ya no quiero seguir con mi retaíla de confesiones. Cambio de chip y os prometo en breve mostraros a la Aru que todos queréis, de verdad de la buena, esa Aru que no entiende de cine, pero que ama el cine, la teleadicta, la que no entiende a los políticos, pero que quiere entender a las personas, la culé hasta la médula, la que ya conocéis muy bien. Hasta pronto!
Por eso tengo casi obligación moral de contaros que sigo aquí, un tanto ausente, pero sigo aquí. Que mi pequeño sigue conmigo, con sus pataditas vitales, con su particular modo de comunicarse conmigo, que me voy sintiendo a gusto, que empiezo a enfocar los problemas con una luz distinta, que estoy mejor.
También añadir que os he seguido en silencio estos días, que he ido visitando vuestros blogs, muchas veces sin comentar nada, porque hay veces que ese silencio es la mejor palabra. Y ya no quiero seguir con mi retaíla de confesiones. Cambio de chip y os prometo en breve mostraros a la Aru que todos queréis, de verdad de la buena, esa Aru que no entiende de cine, pero que ama el cine, la teleadicta, la que no entiende a los políticos, pero que quiere entender a las personas, la culé hasta la médula, la que ya conocéis muy bien. Hasta pronto!
Comentarios
Y me alegro mucho que estes aqui de nuevo,que para nosotros eres como Puyol en el Barça.Si faltas no es lo mismo ni de coña,jeje
Salud!!
El blog como forma de desahogo es una de las terapias del nuevo milenio y espero que, poco a poco, las palabras vuelvan al igual que las ganas de compartirlas. En cualquier caso, evita el silencio, escucharemos -leeremos- cuanto quieras decir. Incluso cuanto quieras callar.
Besos (muchísimos) llenos de cariño (muy sincero, a pesar de que nunca esté a tiempo cuando debo estarlo...) Muaaaks!
Besos.
Todos atravesamos momentos de nula inspiración. Lo mejor es dejar pasar un tiempo, sin presionarse, ya volverá. Y lo cogerás con más ganas, ya lo verás. ¿Acaso nuestro devenir no es cíclico? ¿Porqué iba a dejar de serlo en su medida en los blogs?
No te agobies. Y cuando tengas ganas pues posteas sobre lo que te de la real gana, gustosos te leeremos.
Y si lo que querías es que te mandásemos besos, pues había otras formas de pedirlo, jooos!!!
Muchos besos!! y de los grandotes! Besazos de esos sonoros plantando todos los morros en las mejillas, de los que las abuelas nos sellan con su carmín pringándonos de cariño ;)
A mí me gusta leerte en todas esas facetas y en muchas más. Así que suerte y al toro, que nos gusta que nos leas y nos gusta leerte.
Y te prestaría musas... pero la verdad es que no me hacen mucho caso...
besotes guapa
ya sabes que nosotros tb estamos por aquí, aunque algunos hagan mas ruido que otros.
:P