Sé lo que hicistéis esta semana...

La semana ha estado cargadita de eventos de todo tipo de lo más alentadores. Ayer el Manchester United se proclamó Campeón de Europa en Moscú ante un Chelsea muy valiente. No puedo ocultar que la morriña se apoderó de mí y empecé a recordar aquel 17 de mayo de 2006 diciéndome la ya mítica frase de Casablanca: "Siempre nos quedará París!".


Pero los momentos de melancolía hay que superarlos con decisión y rapideza, y así lo hice. En cuanto acabó el partido me dispuse a ver la season finale del volumen 2 "Generaciones" de HEROES, volumen de tamaño corto, 11 episodios, si lo comparamos con los veintitantos que contenía el volumen 1 "Génesis" por culpa de la ya maldita cien veces cien huelga de guionistas de USA.
Como ya comenté en su momento, esta segunda temporada de HEROES era floja, floja si la comparamos con la primera pero al hilo del final de ésta. Un final que no acabó de cumplir las expectativas de los seguidores de la serie. Tal vez quisimos, o al menos, quise yo personalmente, como fan de LOST, elevarla al nivel de ésta última pero desde luego la trama no está tan bien construida ni tan bien atada y el misterio no se logra mantener del mismo modo. "Generaciones" añade un montón de personajes nuevos a la historia, héroes con nuevos poderes, pero que no acaban de cuajar en el planteamiento global de la historia. Por ejemplo no acabo de comprender qué pinta la historia de Nikki y Micah y la prima de éstos, Mónica, en Nueva Orleans, en la trama principal del volumen que es el virus maligno guardado en Odessa y su destrucción, nada de nada.

Por no decir lo larga que se me hizo la aventura de mi adorado Hiro Nakamura en el Japón de hace cuatrocientos años, que vamos creo yo que con menos episodios habría logrado entender el concepto de la espada samurai, del héroe Takezo Kensei y de las historias que tanto marcaron la infancia de Hiro. Pero bueno ayer como digo por fin vi el episodio final 2x11 "Powerless" y un gran interrogante se dibujó en mi cerebro otra vez ¿cómo va a poder seguir esto? ¿vamos a tener que asistir a la destrucción de las diferentes maldades de los papas de los Petrelli y sus amigos en varios volúmenes? ¿once capítulos le ha costado a Sylar para recuperar su poder? Vaya churro de villano es. En fin que más vale que el volumen 3 titulado "Villanos" que empezará a emitirse en USA en septiembre mejore porque sino me temo que con HEROES me pasará como con HOUSE, que ya la he aburrido. Esperaremos pues.
Y cambiando de tercio un lugar que se encuentra muy concurridito estos días es la Costa Azul francesa, en Cannes festival de cine, y en Mónaco, Fórmula I. Uno si es glamouroso de verdad no debería perderse ninguno de estos acontecimientos. Yo que no lo soy pues me quedo aquí tan ricamente en casa, di que con mi nene tan a punto de salir no me muevo a cinco kilómetros a la redonda del hospital, dicho sea de paso, pero bueno no desviemos el tema. En Cannes dos de mis directores de cine favoritos presentaron película. Por un lado Woody Allen rodeado de caras guapas, excepto la de su mujer, presentó "Vicky Cristina Barcelona" película que aún no he tenido el gusto de ver, evidentemente es lo que tiene no estar en Cannes, pero cuyo título parece indicarme que nos va a contar cosas acerca de una tal Vicky (dudo que sea la flamante ganadora de FAMA), una tal Cristina (dudo que sea la infanta) y Barcelona (que no me cabe duda que sí es la capital catalana). Fuera bromas, la carrera del director neoyorkino sigue blandiendo éxitos en Europa, tras sus experiencias en Londres, ahora aterriza en esta bonita ciudad del Mediterráneo y da de pleno, según la mayor parte de la crítica, con una historia que como no tiene la presencia de los españoles más de moda del momento, que no son Chikilicuatre y sus bailarinas, sino Pe y Javi, o mejor dicho, Penelope Cruz y Javier Bardem.
Por otro lado el maravilloso Clint Eastwood también presentó film en Cannes y enamoró al personal con el mismo, como ya suele ser habitual. "The exchange" protagonizada por la embarazadísima Angelina Jolie cuenta la historia en los años veinte de una mujer a la que secuestran su hijo. Estoy segurísima que una historia así en manos de cualquiera podría convertirse en un bodrío de sobremesa pero en manos del mago Eastwood seguro que se trata de una obra de incalculable talento. Frotándome las manos estoy y así me despido por hoy.

Ah! Y se me olvidaba aún queda el acontecimiento "friki" por excelencia del año. Este sábado Eurovisión, Vargt ya me ha vaticinado que el espectáculo televisivo puede provocarme el parto, yo la verdad es que no me atrevo a pronosticar nada, pero vaya la intención es verlo y reirme un rato, si hay que ser "friki" nosotros seremos los más "frikis" hombre ya!!