Ayer me llamó por teléfono mi muy mejor amiga de la universidad, M. Cuando sufrí el aborto a finales de agosto ella estaba de viaje por Francia varias semanas y sólo le mandé un sms para informarle de lo acontecido. Nos vemos muy poco porque vivimos lejos la una de la otra, ella cumplió años pocos días antes y con mi llamada de felicitación le había dado la buena nueva. Así que M. era de las pocas personas que sabían de mi embarazo y tuve que decirle lo que había sucedido. Su respuesta fue: " Te llamo a la vuelta. Muchos ánimos". Y la llamada la recibí ayer. Como siempre cuando nos llamamos nos pasamos una hora al teléfono poniéndonos al día. Ayer al ver su nombre en la pantalla del móvil sentí como una lágrima de emoción quería escapar de mi ojo, pero me contuve. Empezamos a hablar de la pérdida del embarazo y a medida que iba contándole todos los detalles me sentía mejor y me di cuenta de que lo estoy superando muy rápido, mucho más rápido de lo que esperaba.
Imagino que mi cerebro ha estado ocupado con el retorno a la rutina, el comienzo del cole y muchas otras cosas que no han permitido que me obsesionara con la pérdida de mi bebé. Mi hijo absorbe tanto mi tiempo y mis pensamientos que no hay lugar a más. El primer día lloré mucho, el segundo un poco menos, y esa proporción decreciente se ha ido manteniendo a lo largo de los días. Y eso que no paro de rodearme de mamas embarazadas de su segundo retoño o de conocer nuevos embarazos.
Además con la que está cayendo ahora, no sé pero es escuchar la radio o ver noticias de la crisis en la tele o leer el Twitter, básicamente leer Twitter y escuchar radio porque noticias veo pocas, y me aterro sólo con divisar lo mal que están las cosas y pienso, no es el mejor momento sin duda cabe para aumentar la familia.
Sé que tampoco más adelante voy a tener muchas oportunidades porque ya tengo una edad y esta crisis va para años, pero me da por pensar que si tenemos que ser tres, tres seremos, y en momentos de adversidad si es que llegan, será mucho más fácil de sobrellevar. Ya veis que este razonamiento es materialista y poco sensible a la maternidad, soy consciente, pero la parte más práctica y racional de mí, no me deja pensar de otro modo ahora por ahora. Sé que todo se supera y más con el amor de los hijos por medio pero el panorama es tan negro que la verdad no puedo evitar reconocer que vivo con el susto en el cuerpo metido. Mi natural optimismo al respecto de todo lo que acontece en el mundo cada vez es más difícil de sobrellevar. Pero bueno hoy es viernes y no quiero teñir de gris esta mañana. Quería contaros que estoy mejor del tema de mi aborto y eso es lo importante.
Si más adelante intentaré tener otro hijo o no, es algo que ahora mismo, vuelvo a no saber qué contestar.
Imagino que mi cerebro ha estado ocupado con el retorno a la rutina, el comienzo del cole y muchas otras cosas que no han permitido que me obsesionara con la pérdida de mi bebé. Mi hijo absorbe tanto mi tiempo y mis pensamientos que no hay lugar a más. El primer día lloré mucho, el segundo un poco menos, y esa proporción decreciente se ha ido manteniendo a lo largo de los días. Y eso que no paro de rodearme de mamas embarazadas de su segundo retoño o de conocer nuevos embarazos.
Además con la que está cayendo ahora, no sé pero es escuchar la radio o ver noticias de la crisis en la tele o leer el Twitter, básicamente leer Twitter y escuchar radio porque noticias veo pocas, y me aterro sólo con divisar lo mal que están las cosas y pienso, no es el mejor momento sin duda cabe para aumentar la familia.
Sé que tampoco más adelante voy a tener muchas oportunidades porque ya tengo una edad y esta crisis va para años, pero me da por pensar que si tenemos que ser tres, tres seremos, y en momentos de adversidad si es que llegan, será mucho más fácil de sobrellevar. Ya veis que este razonamiento es materialista y poco sensible a la maternidad, soy consciente, pero la parte más práctica y racional de mí, no me deja pensar de otro modo ahora por ahora. Sé que todo se supera y más con el amor de los hijos por medio pero el panorama es tan negro que la verdad no puedo evitar reconocer que vivo con el susto en el cuerpo metido. Mi natural optimismo al respecto de todo lo que acontece en el mundo cada vez es más difícil de sobrellevar. Pero bueno hoy es viernes y no quiero teñir de gris esta mañana. Quería contaros que estoy mejor del tema de mi aborto y eso es lo importante.
Si más adelante intentaré tener otro hijo o no, es algo que ahora mismo, vuelvo a no saber qué contestar.
Comentarios
Me alegro q estés mejor.
Un abrazo guapa
Tomar decisiones con respecto a aumentar la familia,...., seguramente el tiempo te irá dando pistas, no hay prisa, lo principal ahora es recuperarse emocionalmente y hacerlo tranquila.
Un beso grande.
Vargtttttt guapo!!! Ya me extrañaba que no me hubieras comentado nada. En fin espero que tu ausencia haya sido por cosas buenas. Estoy mucho mejor. Espero leerte más a menudo.
No tengo duda que intentarás y conseguirás aumentar la familia, pero la herida es muy reciente todavía.
Todos mis animos están contigo, lo sabes. Un besazo.