A mí este año no me ha dado la famosa depresión post-vacacional, yo no sé qué ha pasado pero no estoy notando nada especial. De momento me levanto sin mucho problema cada mañana, en la oficina voy capeando como puedo los temporales (unos conatos de Alzheimer si que noto dado que hay temas sobre los que apenas me aparecen sombras difusas en la mente pero que se me van enseguida sólo notar la mirada asesina de mi jefe), en definitiva que de momento la cosa va fina. Ya veremos como sigue.
Aunque creo que todo esto se debe en gran parte a que no veo mucho la televisión. ¿Y qué tiene que ver el cerdo con la velocidad? Pues sí que tiene que ver sí. La primera es que no viendo la caja tonta me ahorro los horribles anuncios de la vuelta al cole de El Corte Inglés, que son la primera causa de intento de suicidio de los albores del otoño cada año, aunque eso no se publique en las encuestas oficiales. También me evito enfrentarme a los anuncios de coleccionables, a todo esto ¿alguien conoce a alguien que haya comprado alguna vez alguno de esos fascículos? Yo es que siempre he pensado que es una leyenda urbana. Además al no consumir mucha televisión sigo con la rutina pre-vacacional de julio, como no echaban nada interesante, pues pasaba de la caja tonta. Y oye tampoco se está mal así. Alguna noche salía a dar una vuelta y pillar un refresco (ahora lo más fácil que pille un resfriado pero bueno), otra noche me veía alguna peli atrasada, y así cortaba un poquito la rutina.
Y hablando de ver películas, hay cosas que hay que reconocer y no ponerse "farrucos" porque son como son. Y una muy elemental es que visionar una peli en cine o en DVD original no tiene color comparado con verla bajo otras técnicas picarescas por todos conocidas.
A mí me encanta el cine, sentarte en la butaca pringada de vete a saber que (yo prefiero pensar que es coca cola), hacer equilibrios intentado encontrar el asiento entrada en mano con la sala a oscuras al tiempo que sostienes con gracia y salero los botes del menú gigante de refresco y palomitas saladas, escuchar el leve crujir del "Crunch" que se zampa el vecino de atrás mientras patalea intermitentemente tu espalda (sí porque las asientos del cine no son parachoques, la gente debería ser consciente de ello), tratar de no escuchar los comentarios de la listilla cinéfila de turno que ha ido a ver"Los cuatro fantásticos y Silver Surfer" pero que sólo está interesada en la filmografía de Godard, en fin todas esas pequeñeces que engrandecen este mundano acto (bueno no tanto porque al precio que se ha puesto la entrada de mundano no tendrá nada, pronto será un bien de lujo, y más si siguen subiendo lo tipos de interés -atención al mensaje subliminal enviado al BCE), y que en definitiva hacen que ver en pantalla grande esa peli que tantas ganas tenías de disfrutar sin caídas bruscas de cámara, ni sombras fantasmagóricas, ni bandas sonoras en forma de tos, sea una bonita experiencia.
Pero vaya aún así todos pecamos y yo la primera, y porque he pecado puedo afirmar con rotundidad que cambia la cosa de ver una peli de imagen nítida y clara en tu estupenda televisión porque te has molestado en bajar al videoclub y alquilarla, o lo más osado, en acercarte a la FNAC y comprártela, a verla como me vi yo ayer noche "Piratas del Caribe 3". Vale que no tenía intención alguna de pagar los eurazos de impuesto revolucionario de los multicines para ver esa peli, ni siquiera alquilarla en el videoclub, de ahí que me la agenciara por otros métodos menos ortodoxos, pero lo de ayer fue toda una experiencia extrasensorial de tinieblas y oscuridad de primer nivel, que hace que la Cámara de los Horrores del Madame Tussaud's sea una atracción para menores de seis años, xddd!!
Bueno me voy a rezar un par de padrenuestros y una avemaría de penitencia...
Aunque creo que todo esto se debe en gran parte a que no veo mucho la televisión. ¿Y qué tiene que ver el cerdo con la velocidad? Pues sí que tiene que ver sí. La primera es que no viendo la caja tonta me ahorro los horribles anuncios de la vuelta al cole de El Corte Inglés, que son la primera causa de intento de suicidio de los albores del otoño cada año, aunque eso no se publique en las encuestas oficiales. También me evito enfrentarme a los anuncios de coleccionables, a todo esto ¿alguien conoce a alguien que haya comprado alguna vez alguno de esos fascículos? Yo es que siempre he pensado que es una leyenda urbana. Además al no consumir mucha televisión sigo con la rutina pre-vacacional de julio, como no echaban nada interesante, pues pasaba de la caja tonta. Y oye tampoco se está mal así. Alguna noche salía a dar una vuelta y pillar un refresco (ahora lo más fácil que pille un resfriado pero bueno), otra noche me veía alguna peli atrasada, y así cortaba un poquito la rutina.
Y hablando de ver películas, hay cosas que hay que reconocer y no ponerse "farrucos" porque son como son. Y una muy elemental es que visionar una peli en cine o en DVD original no tiene color comparado con verla bajo otras técnicas picarescas por todos conocidas.
A mí me encanta el cine, sentarte en la butaca pringada de vete a saber que (yo prefiero pensar que es coca cola), hacer equilibrios intentado encontrar el asiento entrada en mano con la sala a oscuras al tiempo que sostienes con gracia y salero los botes del menú gigante de refresco y palomitas saladas, escuchar el leve crujir del "Crunch" que se zampa el vecino de atrás mientras patalea intermitentemente tu espalda (sí porque las asientos del cine no son parachoques, la gente debería ser consciente de ello), tratar de no escuchar los comentarios de la listilla cinéfila de turno que ha ido a ver"Los cuatro fantásticos y Silver Surfer" pero que sólo está interesada en la filmografía de Godard, en fin todas esas pequeñeces que engrandecen este mundano acto (bueno no tanto porque al precio que se ha puesto la entrada de mundano no tendrá nada, pronto será un bien de lujo, y más si siguen subiendo lo tipos de interés -atención al mensaje subliminal enviado al BCE), y que en definitiva hacen que ver en pantalla grande esa peli que tantas ganas tenías de disfrutar sin caídas bruscas de cámara, ni sombras fantasmagóricas, ni bandas sonoras en forma de tos, sea una bonita experiencia.
Pero vaya aún así todos pecamos y yo la primera, y porque he pecado puedo afirmar con rotundidad que cambia la cosa de ver una peli de imagen nítida y clara en tu estupenda televisión porque te has molestado en bajar al videoclub y alquilarla, o lo más osado, en acercarte a la FNAC y comprártela, a verla como me vi yo ayer noche "Piratas del Caribe 3". Vale que no tenía intención alguna de pagar los eurazos de impuesto revolucionario de los multicines para ver esa peli, ni siquiera alquilarla en el videoclub, de ahí que me la agenciara por otros métodos menos ortodoxos, pero lo de ayer fue toda una experiencia extrasensorial de tinieblas y oscuridad de primer nivel, que hace que la Cámara de los Horrores del Madame Tussaud's sea una atracción para menores de seis años, xddd!!
Bueno me voy a rezar un par de padrenuestros y una avemaría de penitencia...
Comentarios
Y puedo prometer y prometo que yo he hecho un coleccionable. Pero no cuenta, era de Star Wars y lo hice como buen friki que soy para esas cosas...
Sett: Sí trabajar en agosto no está mal, la verdad, aunque a mí no me quedan más narices que hacer vacaciones en ese mes... c'est la vie!
Juan R.: Anda, así que no es una leyenda urbana!!!
Elbé: Sí, lo confieso, enterita, y es más larga que un día sin pan, te lo aseguro!